El gitano y el juicio
Sale un gitano de un juicio, acompañado de la Guardia Civil, y cuando lo van a meter en la
furgoneta le suena el móvil.
Lo coge el gitano:
-¿Quién es?
-Manuel, soy tu mujer, ¿cómo ha salido el juicio?
Dice el gitano:
-¿El juicio? El juez me ha dicho que 7 años de cárcel o 6000 euros.
Dice la mujer:
-Manuel, tú coge el dinero, no seas tonto.
(Gracias Curro)
En el cine
50 gitanos en un cine viendo una película.
Cuatro guardias civiles en la última fila viendo la misma película.
¿cómo se llama la película?
…
Conductor borracho
A un tipo le para la Guardia Civil de Tráfico cuando iba conduciendo hacia su casa en compañía de su esposa.
Tipo: -¿Cuál es el problema agente?
Oficial: -Circulaba a 120 Km/h en una zona de 80.
Tipo: -No señor, iba a 85.
Esposa: -No es cierto Luis, ibas a 120.
El tipo le echa una mirada de advertencia a su mujer.
Oficial: -También lo voy a multar porque tiene fundida la luz de freno de
la izquierda.
Tipo: -¿Luz? ¿Qué luz ? No tenía ni idea.
Esposa: -No te hagas el tonto, Luis. Te dije que tenías la luz fundida
hace lo menos 6 semanas.
Esta vez la echa una mirada venenosa, de esas que causan pavor.
Oficial: -También lo multaré por no usar el cinturón de seguridad.
Tipo: -¡Pero si me lo quité en el momento que me detuvo!
Esposa: – ¡¡¡Por favor Luis!!! ¡¡¡Pero si tú nunca lo utilizas!!!
Normas de circulación
Un individuo va conduciendo y se salta una señal de «stop» descaradamente, pero es observado por un guardia civil que le da el alto.
– Buenas tardes, caballero. Haga el favor de mostrarme su permiso de conducción.
– ¿Y eso, de qué?
– ¿Cómo que de qué? Usted no se ha parado a la altura de la señal de «stop».
– ¿Y qué, passsa algo? Reduje la velocidad y, además, no venía nadie.
-La normas de circulación obligan a pararse, no a reducir la velocidad. Su documentación, por favor.
– ¡No me fastidies! A ver, ¿cuál es la diferencia, so listo?
– La diferencia es que debía haberse detenido completamente en vez de aminorar la marcha. Los papeles, pero ¡YA!
– ¡Y dale con la brasa! Si usted es capaz de enseñarme la diferencia entre reducir y parar, le mostraré mis papeles.
– Muy bien, le haré una demostración. Haga el favor de apearse del vehículo.
El individuo, intrigado, sale del vehículo al tiempo que el guardia civil saca la porra y comienza a darle una tanda de golpes que le dejan doblado. Entonces, el guardia civil le pregunta:
AHORA, ¿DESEA USTED QUE ME PARE? Ó ¿QUE REDUZCA LA VELOCIDAD?
(Gracias L@dy)